os gustaría que el hecho de que vaya a vivir la experiencia de un Ciclo de desarrollo Otto Walter sea algo que le motive e ilusione. Estamos muy orgullosos de tenerle como participante.

Es muy gratificante compartir experiencias con excelentes profesionales, capaces aún de ponerse en cuestión a sí mismos. No todos asumen ese riesgo. Así que, el hecho de que acuda a la primera sesión ya merece, de todo el equipo de Otto Walter, nuestra más entusiasta felicitación.

Para la mayoría, esta es la primera pregunta, y con mucha razón. Al fin y al cabo, los asistentes a un Ciclo OW son personas con experiencia, que probablemente han hecho ya varios cursos a lo largo de su carrera profesional y, además, si están donde están es porque ya han demostrado su valía. Entonces, ¿para qué participar?

¿Se imagina poder sacar el máximo partido de toda la experiencia y conocimientos que tiene? ¿Cuánto podría mejorar si fuera capaz de aprender a usar con más eficacia todo lo que ya sabe? Pues esta es, precisamente, la oportunidad que se le presenta ahora.

Como podrá comprobar pronto, el Ciclo Otto Walter no es realmente un curso, sino un medido proceso de evolución personal. Además, no sabe exactamente lo que le espera y en ello radica también parte de su atractivo.

Haremos un recorrido por todas las situaciones y comportamientos profesionales que afectan al objetivo de desarrollo del Ciclo. De entrada, no verá ninguna novedad revolucionaria, ni queremos presentarle teorías, técnicas, ni recetas enlatadas. Simplemente, le ayudaremos a que usted mismo descubra, conscientemente y de forma práctica, cómo funcionan y qué efectos tienen los diversos comportamientos y así logre hacer más lo adecuado en cada momento preciso.

Tanto por la forma participativa con la que se desarrolla el Ciclo, como por su método de trabajo, el enfoque del día a día, su inmediata aplicación práctica y la sensación de “aire fresco” que se percibe, junto con un clima muy agradable y muy exigente a la vez, hacen que cada Ciclo OW sea una acción que, sin duda, le dejará huella.

Ahora bien, nada es fácil y mucho menos lograr todo esto sin un esfuerzo importante. Y aquí entra usted, pues en su mano estará el aprovechamiento de este Ciclo.

Mejorar no es sencillo, y aquí hablamos de MEJORAR DE VERDAD, de hacer las cosas de otra manera, vamos, de CAMBIAR y romper con ciertos hábitos y formas de entender las cosas que, a menudo, nos bloquean y sacan una versión muy inferior del profesional de alto nivel que llevamos dentro. ¡Ahí es nada!

"Porque aprender, bueno, siempre se aprende algo, pero ¿cambiar? ¡Eso ya son palabras mayores!”

Esta reacción inicial es normal. Pero si hacemos una formación y dentro de unos meses continuamos haciendo todo exactamente igual que antes, ¿de qué habría servido el aprendizaje? ¿A quién le sobra tiempo para ver cosas que no tienen aplicación en la realidad?

Aquí le garantizamos que sólo hablaremos de herramientas concretas, de forma práctica, sencilla y directa. Llamaremos a las cosas por su nombre, por mucho que incomode afrontar ciertos enfoques, que a veces cuesta, y mucho. El Ciclo OW comienza proponiendo unas bases aparentemente simples, que poco a poco, van ofreciendo un sólido entramado para lograr actuar con mayor nivel profesional.

El Ciclo consta de una serie de amenas e intensas jornadas de trabajo separadas por unos períodos de Experiencia Práctica Consciente (EPC®), y se extiende durante un periodo amplio de tiempo. Los cambios no se hacen de un día para otro, y en los periodos EPC tendrá la oportunidad de descubrir por sí mismo cada aspecto tratado “de salón” en las jornadas presenciales, y adaptarlo a su realidad y a su forma de ser.

Cada jornada se formulará objetivos y metas concretas, que se transformarán en hechos concretos, lo que le proporcionará las experiencias conscientes necesarias para que descubra por sí mismo qué cosas le van mejor haciéndolas de otra manera y, por tanto, qué cambios va incorporando.

Un participante nos comentó una vez: “si vais a tratar de ayudarme a que logre cambiar de una vez, os compadezco. Yo mismo llevo intentándolo durante años y al final ¡Siempre vuelvo a caer en los mismos condenados hábitos!”.

Compartimos plenamente este comentario. Nadie ha dicho que esto vaya a ser fácil, ni mucho menos. Si fuera así no harían falta tantos esfuerzos. ¿Por qué muchos tienen que apuntarse a un gimnasio para ponerse en forma cuando podrían hacer los mismos ejercicios en su casa y gratis? Porque la mayoría evolucionamos mejor con la ayuda de un experto que nos guíe, nos dé una buena metodología, nos aliente y nos exija.

Los buenos profesionales, cuando quieren mejorar aún más acuden sin dudar a un especialista que les ayude a exigirse, que les anime a continuar a pesar de las dificultades, que les guíe con una metodología eficaz y de garantías, y que sepa comprender nuestra realidad diaria. Muy pronto conocerá personalmente a su “desarrollador”.

Los directores de Ciclos OW son profesionales Top-senior, con más de quince años de experiencia previa en dirección y ventas antes de incorporarse a Otto Walter, que han trabajado con varias empresas y que han asumido el firme compromiso de apoyarle en su desarrollo. Pero también le van a exigir, y esperan de usted tesón y ganas por obtener resultados, que necesitan de su participación activa, su implicación y su inquebrantable voluntad de mejorar.

Y no le dirán sí a todo, sino que le propondrán retos para “ponerle a prueba”, para enfrentarle a los desafíos de cada día. Ahora bien, por muy preparados que estén en la metodología OW, ningún consultor es capaz de conseguir que alguien mejore si el otro no quiere ni pone nada de su parte. Para eso precisamos de su colaboración, de su disposición para ponerse en cuestión a usted mismo y dejarse guiar.

Anímese a esta experiencia que ya han vivido con éxito miles de profesionales. Y todos los que se implicaron de verdad acabaron afirmando: “¡Realmente ha merecido la pena!”.

Si es así sólo le pedimos una cosa: dese una oportunidad, y tan sólo le pedimos un “sacrificio” inicial. Compartirá con un grupo reducido de profesionales diversas situaciones perfectamente identificables, y encontrará varios planteamientos comunes a su forma de ver las cosas y otros, quizá, contrapuestos.

El esfuerzo que le pedimos es que ¡haga de lo diferente una oportunidad para aprender y mejorar y evite cuestionarlo todo porque algo no coincida a priori con su idea! Y para ello le proponemos un primer reto: acuda a la primera jornada con la mente lo más abierta posible. Trate de encontrar en cada concepto una ocasión para la autorreflexión sobre aspectos clave de nuestro entorno cotidiano, y entréguese durante unas semanas a experimentar los objetivos que se haya marcado en cada día del Ciclo.

Pronto comprobará por usted mismo cómo, haciendo casi lo mismo de siempre con pequeños matices y mucho más criterio, descubrirá un inmenso campo de posibilidades para aplicarse con mayor eficacia y disfrutar mucho más de su trabajo. Ahora bien, hay una faceta que debemos afrontar. ¿Qué pasará cuando los de mi entorno empiecen a notar cambios en mi forma de hacer, de actuar con ellos, de tratarlos, etc.?

“Alarma general, recordad lo que le pasó la última vez, cuando estuvo varios días haciendo cosas raras y aplicando técnicas estrafalarias.”

Es comprensible que pueda tener la sensación de que algo así podrían pensar en su entorno si empieza a cambiar, así, de repente. Y eso puede llegar hasta frenar su entusiasmo inicial.

Permítanos una sugerencia. Atrévase a plantear claramente la situación a los que le rodean. Adviértales que van a notar muchas cosas diferentes, que está reconsiderando muchas cuestiones clave y que esto se transformará en nuevas oportunidades y mejoras en su comportamiento profesional.

Y si no ve oportuno hacer esto, tenga en cuenta que, en cualquier caso, notarán cambios. ¡Pues qué los noten! Si con ello logramos que todo funcione mejor verá cómo pronto se apuntan y apoyarán su evolución. ¡Le deseo una participación positiva y el mayor aprovechamiento del Ciclo OW!

Paco Muro
Presidente ejecutivo de Otto Walter